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Unidad de retina

Preguntas frecuentes sobre RETINA Y VÍTREO

Queremos dar respuesta a las preguntas más frecuentes que nos plantean nuestros pacientes sobre los problemas de retina y vítreo que padecen y los tratamientos que ponemos a su disposición.

1) ¿Qué son la retina y el vítreo?

La retina es un tejido nervioso sensible a la luz que recubre la superficie interior del ojo. Es la capa más interna del globo ocular y está formada por un entramado de células neuronales. Su función consiste en captar la luz, transformarla en impulsos nerviosos y, posteriormente, enviarlos al cerebro a través del nervio óptico donde se traducen en imágenes.

Por su parte, el vítreo es una sustancia gelatinosa y transparente en condiciones normales que rellena el globo ocular.

2) ¿Qué síntomas me pueden alertar de la presencia de una enfermedad relacionada con la retina?

Los síntomas más comunes que indican la presencia de alguna enfermedad relacionada con la retina son:

  • Pérdida de visión.
  • Visión borrosa.
  • Visión distorsionada de los objetos.
  • Aparición repentina de cuerpos flotantes que se desplazan por el campo visual (moscas volantes) y sombras.
  • Fotosensibilidad y deslumbramientos.

3) Si veo moscas volantes o miodesopsias, ¿debo acudir al oftalmólogo?

Las moscas volantes afectan a todo tipo de personas, en mayor o menor medida. La aparición en la visión de estas manchas no comporta necesariamente ningún problema, pero si ocurre de forma llamativa, es de vital importancia realizar una valoración oftalmológica de inmediato para determinar sus causas y descartar un posible caso de desgarro o agujero en la retina.

4) ¿Cuáles son las principales patologías que afectan a la retina y el vítreo?

Las principales patologías que afectan a estas estructuras oculares son:

  • El desgarramiento y/o desprendimiento de retina.
  • El desprendimiento de vítreo posterior.
  • La miopía magna.
  • Las patologías maculares, como la DMAE.
  • La retinopatía diabética.
  • La retinosis pigmentaria.
  • Las oclusiones venosas o arteriales de la retina.

5) El desprendimiento de retina, ¿genera dolor?

No, el desprendimiento de retina no causa dolor y sus síntomas son siempre visuales.

6) Si sufro un desprendimiento de retina, ¿podré recuperar la visión?

El desprendimiento de retina es una patología de atención prioritaria en oftalmología, ya que, si no se trata en sus fases iniciales, puede causar daños irreparables. En la actualidad, existen diferentes opciones quirúrgicas que permiten la reparación de los daños provocados, aunque no siempre se recobran las funciones visuales por completo. Lo importante es que la técnica indicada se realice lo antes posible, a fin de conseguir el mejor resultado.

7) ¿Cuál es la diferencia entre el desgarramiento y el desprendimiento de retina?

El desgarramiento de retina constituye una fase inicial del desprendimiento, durante la cual se pueden apreciar síntomas como la aparición brusca e intensa de moscas volantes o manchas oscuras que cambian de posición al mover el ojo.

Si no se aplica un tratamiento de forma temprana, el desgarramiento puede progresar hasta un desprendimiento de retina. A medida que el desprendimiento avance, el paciente apreciará destellos luminosos, distorsión de las imágenes, así como un velo o tela negra que cubre una zona de su campo visual, limitando su visión periférica. En caso de padecer estos síntomas, se deberá realizar una consulta urgente con el oftalmólogo.

8) ¿En qué consiste el desprendimiento de vítreo posterior?

Es un proceso fisiológico relacionado con el envejecimiento del ojo que ocurre cuando el humor vítreo modifica su consistencia, de modo que unas zonas se licuan y otras se condensan. Con el paso del tiempo, el vítreo se va degradando de forma natural, ocasionando que la hialoides -membrana que lo envuelve- se separe de forma espontánea de sus puntos de fijación en la retina.

9) ¿Cómo puede afectar la alta miopía al desarrollo de patologías de retina?

La miopía magna o alta miopía (más de seis dioptrías) se debe a un alargamiento excesivo del globo ocular que suele estar asociado a un adelgazamiento de la retina. Este crecimiento exagerado del ojo puede determinar la aparición precoz de un desprendimiento de vítreo posterior y constituye un importante factor de riesgo en el desprendimiento de retina. De igual modo, aumenta la predisposición a desarrollar con más frecuencia cataratas y glaucoma.

Por ello, resulta esencial que el paciente con miopía magna se someta a evaluaciones oftalmológicas periódicas con oftalmólogos expertos en retina para prevenir la aparición de estas complicaciones, que pueden perjudicar seriamente su visión.

10) ¿Qué es la mácula?

La mácula es una pequeña área de pigmentación amarilla en el centro de la retina (es su parte más fina), que cuenta con una gran concentración de células fotorreceptoras. A pesar de su reducida extensión, tiene una gran relevancia en las funciones oculares, ya que es la responsable de la visión central, la visión del movimiento del ojo humano, así como de la visión más precisa. Las patologías de la región macular se caracterizan por presentar sintomatología que afecta a esta visión central.

11) ¿Qué patologías afectan con mayor frecuencia a la zona de la mácula?

Las enfermedades que con mayor frecuencia afectan a la mácula son:

  • El agujero macular.
  • La Degeneración Macular Asociada a la Edad (DMAE).
  • El edema macular.
  • La membrana epirretiniana macular (MER).

12) ¿Qué es la Degeneración Macular Asociada a la Edad y cómo se manifiesta?

La Degeneración Macular Asociada a la Edad (DMAE) es una enfermedad degenerativa de la mácula que provoca un deterioro progresivo de los tejidos del ojo y que va asociada generalmente a su envejecimiento.  La DMAE no produce dolor, pero puede presentar diversas alteraciones visuales como la visión distorsionada de los objetos, visión borrosa, aumento de la sensibilidad a la luz o pérdida repentina de la visión central. Cuando la enfermedad se encuentra en una fase más avanzada, el paciente refiere ver una mancha oscura en la zona de la visión central que puede oscurecerse y agrandarse.

La DMAE no se puede prevenir porque está ligada al proceso natural de envejecimiento. Por ello, es recomendable que el paciente realice controles periódicos con el oftalmólogo a partir de los 50 años, puesto que el diagnóstico precoz puede evitar en muchos casos que la enfermedad acabe derivando en ceguera.

13) ¿Qué es la retinopatía diabética?

La retinopatía diabética es la afección más frecuente de la retina y la principal causa de ceguera en el mundo occidental. Es una complicación ocular y vascular de la diabetes mellitus, que se origina cuando se deterioran los vasos que irrigan la retina. Puede afectar a cualquier paciente con diabetes tipo 1 y tipo 2.

El control insuficiente de esta enfermedad por parte del paciente y los elevados niveles de glucemia provocan alteraciones que pueden afectar a la retina de diferentes formas. En cualquier caso, el daño progresivo a estructuras oculares fundamentales a consecuencia de la diabetes puede comportar una pérdida severa de visión, e incluso, conducir a la ceguera, si no se recibe un tratamiento adecuado.

14) ¿Es posible recuperar la visión perdida a causa de la retinopatía diabética?

Gracias a las opciones quirúrgicas actuales, en muchas ocasiones es posible restablecer la visión de pacientes ciegos, aunque no sea por completo. Sin embargo, cada vez son menos los casos en los que es necesario intervenir, gracias a que existe una mayor concienciación sobre esta enfermedad y sus consecuencias para la salud visual.

15) ¿Qué es la retinosis pigmentaria?

Es la enfermedad hereditaria más frecuente de la retina. Consiste en la degeneración progresiva de las células sensibles a la luz (fotorreceptores), que produce una disminución gradual de la visión. En fases avanzadas, puede llegar a causar ceguera.

Los síntomas iniciales de la enfermedad a los que conviene prestar atención son la disminución de la visión nocturna y la reducción progresiva del campo visual, que empieza afectando solo a la visión periférica. A medida que la enfermedad avanza con el paso de los años los síntomas se agravan, y es entonces cuando la percepción de los colores empieza a verse alterada, aparecen los deslumbramientos y la visión en túnel, debido a que la visión central también ha quedado afectada.